Acabo de leer en planeta murciano el post sobre "lugares sentimentales". Aquellos lugares que en los años que llevamos vividos nos han marcado y han quedado en nuestro ser.
Todos somos iguales por que todo lo percibimos a través de los sentidos, pero esta igualdad también nos hace diferentes. Cada persona guarda en su "memória histórica" ó mapa de los recuerdos, distintas sensaciones.
Todos recordamos lugares, olores, canciones que por distintos motivos nos transportan en el tiempo.
La semana pasada al entrar en una habitación de la casa de campo, el olor me llevó directamente a la época en la que era pequeño, mis abuelos vivian allí y en el verano me iba a pasar alguna semana.
Esa memória particular e intransferible con el paso de los años va evolucionando, entran nuevas sensaciones y también salen otras para no volver nunca mas.
Todo esto me hace pensar... ¿me estaré haciendo viejo?
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1 comentario:
No, no te estás volviendo viejo.
La zona del cerebro que regula los olores es de las más antiguas en el desarrollo del sistema nervioso, y conecta directamente con el area de la memoria.
Traducción al cristiano:
Yo, aveces, me he cruzado en la calle con alguna persona que llevaba la colonía que utilizaba mi abuelo paterno. Y, cada vez que me ha pasado, me he quedado clavado en el sitio, sin poder ni moverme ni hacer nada. El olor me devuelve a otra época.
Y no cambio por nada esta forma tan personal que tengo de llevar a mi abuelo siempre en mi corazón,... su olor!
Fran
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